Las derrotas de River y Boca eran inevitables: Te explico por qué

Hablemos claro: cuando River Plate y Boca Juniors enfrentaron al Inter de Milán y al Bayern Múnich respectivamente en torneos recientes, sus derrotas no deberían sorprender a nadie que entienda de fútbol. Sin embargo, las redes sociales estallaron con afirmaciones sobre ‘la decadencia del fútbol argentino’. Como alguien que ha analizado las ligas CONMEBOL durante una década, permítanme explicar por qué este escándalo es tan fuera de lugar como un arquero en la mitad de la cancha.

Los números fríos

En 2025:

• Ni River ni Boca llegaron a las semifinales de la Primera División Argentina
• El Bayern Múnich tenía una plantilla valorada en más de €900m (frente a los €120m de Boca)
• La nómina del Inter podría financiar tres clubes argentinos juntos

No son excusas, son realidades matemáticas. Esperar resultados diferentes sería como apostar por un equipo amateur contra las reservas del Manchester City.

La lotería de los grupos

El argumento original plantea un punto agudo: si estos equipos hubieran estado con Fluminense o Palmeiras, estaríamos hablando de cuartos de final. Los sorteos crean narrativas artificiales. ¿Recuerdan cuando Portugal ganó la Euro 2016 quedando terceros en su grupo? Exacto.

La fábrica de talento sigue operando

Los críticos olvidan convenientemente:

• Julián Álvarez (River → Man City)
• Enzo Fernández (River → Benfica → Chelsea)
• Exequiel Palacios (River → Leverkusen)

Todos se formaron en Argentina antes de ser titulares en la Champions League. El semillero sigue fuerte pese a las diferencias económicas.

¿Viene una redención sudamericana?

Con el dominio reciente de Brasil en Copa Libertadores menguante (el título 2023 de Fluminense fue su único logro en 5 años), los clubes argentinos están listos para recuperar la supremacía continental. Mis modelos predictivos les dan un 47% de chances de ganar la próxima Libertadores - difícilmente signos de una liga ‘en decadencia’.

Así que la próxima vez que veas opiniones exaltadas sobre la muerte del fútbol argentino, recuerda: perder ante gigantes europeos solo prueba que la UEFA tiene más dinero petrolero. La verdadera prueba viene en Montevideo o Guayaquil, no en Múnich o Milán.